Huawei ha ocupado los titulares de la mayoría de periódicos y telediarios en las últimas semanas, desde que Estados Unidos decidiera prohibir oficialmente el uso de equipos de redes de fabricantes chinos al señalar que representan un riesgo de seguridad. Esta decisión se culminó en mayo, cuando el Presidente Donald Trump decidió incluir de forma oficial a Huawei en una lista negra comercial que prohíbe que la compañía adquiera componentes de firmas estadounidenses sin una aprobación previa.
A pesar del duro revés que esta medida ha supuesto para Huawei, la empresa china no ha cesado en sus planes de expansión y continúa anunciando nuevos terminales, lanzando nuevas campañas de promoción y entrando en nuevos sectores con alto potencial de crecimiento.
Fue fundada en 1987 como distribuidor de productos importados de PBX (central telefónica conectada directamente a la red pública de telefonía para gestionar llamadas internas), y dos años después comenzó su propia producción y venta. Con el paso del tiempo, comenzó a lanzar su equipo de terminales telefónicas, para en 1996 comenzar a dar sus primeros pasos fuera de China.
A través de diferentes acuerdos con otras compañías como IBM, 3Com, Siemens o Symantec, Huawei se va abriendo un hueco en el mercado de las telecomunicaciones hasta ser reconocido en la actualidad como el tercer productor de smartphones del mundo, tras Apple y Samsung.
Vocord es una empresa rusa desarrolladora y fabricante de sistemas de seguridad basados en la visión artificial y algoritmos inteligentes. Especializada en tecnología de reconocimiento facial, la compra incluyó patentes de tecnología y parte del equipo de desarrollo de la compañía.
El acuerdo se cerró en unos $50M, y servirá a Huawei para potenciar su tecnología y añadir nuevas características en sus futuros terminales.
Startup israelí que ofrece soluciones de seguridad y cumplimiento normativo para bases de datos, especialmente cuando éstas se encuentran alojadas en la nube. Con varias rondas de inversión a sus espaldas había logrado expandirse internacionalmente.
Con el objetivo de dotar de mayor seguridad las bases de datos y asegurar el cumplimiento normativo en su uso, especialmente en entornos cloud, Huawei pagó $42M para hacerse con el control de Hexatier.
Neul está especializada en el desarrollo de sensores de bajo consumo que permiten monitorizar todo tipo de escenarios industriales y médicos. Esta startup británica fue la protagonista de desarrollar la tecnología para la primera carretera inteligente diseñada para controlar el flujo de tráfico y evitar distintos tipos de tráfico.
Con la adquisición acordada en unos $25M, Huawei apuesta por ofrecer en el futuro a sus clientes diversas soluciones y productos optimizados para Internet de las Cosas.
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